Algo extraño en una web...
¡El Blog!
La geometría y sus cosas
Publicado por primera vez el 31 de agosto de 2004 Es cierto que yo, como el gran Groucho decía, tampoco pertenecería a un club donde me admitieran pero sí puedo amueblar un cuarto de baño con estanterías para que parezca
Haciendo mis pinitos… me salen los refritos
Publicado por primera vez el 25 de agosto de 2004 Esperaba yo,asomado a la ventana,ver la deseada faz,de aquella: mi dama. Tarde se hacía, casi de noche.No llegaba el carruaje.No asomaba su traje.Y no aparecía su coche. El tiempo no
Advertir que la mayoría de cosas, por no decir todas, que están aquí llevan tiempo escritas. Ha sido un trabajo muy complicado recuperarlas y más aún mezclarlas con nuestro «hoy». Así que no, no se trata de un dejá vu, es una copia de mí mismo desde que empecé a copiarme. Y no pienso parar, estoy lanzado.
Y esto empezó en el siglo pasado.
Claro, lo primero es la presentación y todas esas cosas
Pues… que haya mucho o poco que contar depende siempre del momento. De las ganas, de la inspiración, de los objetivos. Y yo, ahora no tengo claro nada, salvo las ganas.
Por suerte muchos conocen ya Glarester, algunos no pero sí han oído hablar de «eso» Ese ducado ficticio, imaginario y alocado que nunca llegó pero siempre estuvo ahí. Que nunca existió pero sobrevivió a muchos momentos, a muchos cambios, a muchas evoluciones y que sigue sin rendirse.
Pero a lo que vamos: ¿Cúando, cómo y por qué nació?
Pues verás, esto vino por…Upssssssss… es demasiado largo y seguramente te interese poco o menos todavía.
Aunque si no es así y quieres leerlo, puedes prepararte un café (o lo que prefieras), acomodarte bien, apagar el móvil (no te olvides de sacar la basura o no te dejarán en paz) y colgar ese bonito cartelito que hay en todas las habitaciones de todos los hoteles de todo el mundo (bueno, casi) donde dice: «Hey, no me toques las webs» que traducido al idioma del bueno de Shakespeare viende siendo «Do Not Disturb» o algo así.
Y venga, que ya toca. Listos, preparados…
Secciones especiales
O sea, que no sabía muy bien donde meterlas
